martes, 14 de octubre de 2014

Cala Murta. Península de Formentor (Mallorca).

La estrecha península de Formentor se extiende unos 12 kilómetros hacia el nordeste de la isla de Mallorca. En su punto máximo alcanza una anchura de 3 kilómetros. Se trata de una lengua de tierra formada por una cordillera erizada; inaccesibles masas de roca con imponentes acantilados sobre el mar. Alcanza los 423 metros de altitud en el Puig del Pal.

Una sinuosa y espectacular carretera, finalizada en 1951, recorre esta península excepcional desde el Port de Pollença hasta el faro. De ella parten ancestrales caminos y sendas que llevan a miradores, atalayas, cimas y a las escasas calas que se forman en tan abrupto litoral.
El trayecto que nos ocupa nos llevará hasta Cala Murta, abierta a la bahía de Pollença.

Nuestro itinerario parte del punto kilométrico 12,800 de la carretera; ahí hay un espacio para dejar un par de coches. Si estuviera ocupado, en el kilómetro 13 encontramos el amplio aparcamiento del acceso a Cala Figuera.

El camino asfaltado discurre por un ameno bosque donde abundan los pinos de Alepo y las encinas; sin embargo el protagonista es el palmito, llamado garballó en Mallorca, la única palmera autóctona de Europa. En la isla sólo lo encontramos en tres zonas aisladas: Formentor, Andratx y las montañas de Artà.

Durante el paseo, que completé con la subida a Es Fumat, me encontré con varios ejemplares de boc, la cabra salvaje mallorquina.

Duración de la caminata: 20 minutos hasta Cala Murta + 10 minutos a Es Castellet.


Fotos de Antonio Vela.








 El camino discurre por un frondoso bosque donde predominan los pinos de Alepo.









 Corteza de pino de Alepo.




 El palmito (garballó) es la única palmera autóctona de Europa.














 El palmito (garballó) es la única palmera autóctona de Europa.




 Formentor es el único enclave de Mallorca donde el bosque de encinas llega a pocos metros del mar.









 El boc es la cabra salvaje mallorquina.




 El boc es la cabra salvaje mallorquina.




 El palmito (garballó) es la única palmera autóctona de Europa.







Pasados unos diez minutos de caminata dejaremos a mano izquierda un merendero con mesas. De ahí parte una senda que busca el viejo camino del faro para ascender al Coll de sa Bretxa y Es Fumat.
Diez minutos más y llegamos a Cala Murta, una ensenada de grava y piedras -de unos 60 metros de ancho- en la que únicamente se encuentra un viejo chalet.
Aquí comienza el Camí Vell del Far, viejo camino del faro, iniciado en 1857 para unir un embarcadero habilitado aquí y el faro de Formentor.

Si miramos hacia el mar es muy recomendable tomar una senda que parte a nuestra derecha y llega -en unos diez minutos- hasta el promontorio de Es Castellet, desde donde se divisan las montañas de Artà, la península de La Victòria y la bahía de Pollença. En realidad Es Castellet es un islote, pero tan cercano al promontorio que nos es difícil percibirlo salvo que nos acerquemos por mar.



 Cala Murta.



Los asnos autóctonos se asoman al mar.














 Cala Murta.




 La senda costera de Es Castellet.




 Avistamos el islote de Es Castellet.









 La senda costera de Es Castellet.




 Cala Murta.





 Cala Murta.




Camino de Es Castellet.




 Cala Murta.




 La sombra proyectada sobre el tronco de un pino de Alepo.




 Líquenes en la roca.




                                                            Costa de Ses Butzes.




Costa de Ses Butzes.




 Cala Murta.




 La bahía de Pollença.









  La bahía de Pollença. Punta de Ses Salines.










  La bahía de Pollença. Punta de Ses Salines.





 Palmito colonizando el acantilado.




Morro del Pont.




 Es Castellet. En el horizonte se recortan las montañas de Artà.




 Líquenes en la caliza.




  Es Castellet. En el horizonte se recortan las montañas de Artà.




Contraluz en la bahía de Pollença. Silueta de la península de La Victòria.